23 de febrero de 2010

Las Pensiones y las PYMES, algunas falacias

Siguiendo con el tema del blog anterior, veo, escucho y leo, como todos, muchas opiniones al respecto y como no siempre puede uno saltar en ese momento a escribir o contestar, relato algunas de las, a mi modo de ver, falacias más repetidas y que pueden provocar el efecto de asentarse en las opinión mayoritaria ya que como sabemos se dice....  repite que algo queda:

Se dice:
El sistema de Pensiones quebrará en el 2025 si seguimos con el actual método de cálculo.
Se debiera decir: Unos simples cálculos con datos del INE, nos dicen que del año 92 al 2009, la población se ha incrementado en un 20% mientras que la pensión media de jubilación (valor actualizado) se ha incrementado un 117%. El coste por habitante ha crecido un 200%. Estos incrementos, necesarios sin duda para compensar situaciones anteriores de injusticia social, no se mantendrán en el futuro ya que ahora partimos de la situación inversa es decir la mayoría está cubierta por el sistema (no digo que bien en todos los casos) y la tendencia es compaginar vida laboral con vida familiar y por lo tanto incrementar el trabajo a tiempo parcial lo cual no olvidemos alarga el tiempo de calendario necesario para obtener derechos contributivos. Como se dice en finanzas, “rendimientos pasados no garantizan futuros”.


Se dice:
La forma de corregir la situación es que cada trabajador aporte más al final de su vida laboral

Se debiera decir: Hay que desarrollar nuevas fórmulas que permitan que “todos” los trabajadores y sus empresas aporten durante “toda” su vida laboral, aún que ello implique un ahorro (menor disponibilidad) a lo largo de toda la vida laboral a cambio de la recuperación posterior.


Se dice: Ampliando la edad de jubilación el Estado ahorra las pensiones de ese tiempo adicional.

Se debiera decir: Los nuevos hábitos de la vida laboral, como decía antes la conciliación de la vida familiar o el desarrollo personal así como las nuevas tecnologías aumentarán el número de personas que reduzcan su jornada laboral a tiempo parcial, por lo que es previsible efectos contrapuestos como la consiguiente reducción en las bases de cotización a efectos de pensiones y desempleo y por contra el deterioro de las cotizaciones, así como el aumento del número de parados en esas fases últimas de la vida laboral. Subsidios, desempleo y pensiones diversas, parten de distintos presupuestos incluso de distintos gobiernos (central y autonómicos), pero como decía un viejo eslogan, Estado somos todos, no desvistamos a un santo para vestir otro.
Evaluar estos datos usando sólo datos históricos es un error, salvo para ver tendencias.


Se dice: Aumentar el numero de años computable para el cálculo de la pensión de Jubilación deteriora la pensión media.

Se debiera decir: Es imprescindible para la credibilidad y transparencia del sistema aumentar los años de cálculo hasta la vida laboral completa, eso permitiría además un incentivo para que Todos cotizaran (jóvenes, inmigrantes, empresarios..), evitando tentaciones al tiempo que se transmite una imagen de justicia que evita las picarescas, en las que somos verdaderos expertos y que a pesar de estar tan perseguidas por leyes, no dejan de provocar injusticias como es el caso de los autónomos que no pueden aumentar la base de cotización a partir de cierta edad a diferencia del resto de trabajadores.
Por otra parte existen muchas fórmulas que permiten evitar la posible injusticia que se provocaría en los próximos diez años a las rentas inferiores, que según cálculos serían las más afectadas, dicho cambio puede hacerse de forma gradual o simplemente a elección del cotizante.
Además cualquier cambio afectará a la pensión media, o no afecta a la media pagar dos años más además de dejar de cobrar pensión durante los mismos.


Se dice: Rebajar las cotizaciones a las empresas pone en riesgo el sistema de Seguridad Social

Se debiera decir: La disminución de las cotizaciones, condicionada al aumento de las contrataciones (o al número de empleados /facturación /módulo) aumentaría la cotización global y puede ser una de las ayudas para reducir el paro y para el aumento de la productividad al rebajar el coste de empleo.


Se dice: Los empresarios, opinan...

Se debiera decir: Tanto en el tema pensiones, como en los comentarios sobre el modelo económico o los cambios de contratación laboral, siguen confundiéndose los términos, autónomo, pyme, gran empresa, banca... .
Es lógico que en función de sus intereses alguien confunda metiendo todo en el mismo saco, pero hay que saber y decirlo que trabajamos bajo distintas condiciones sociales, económicas e incluso legales por lo que sería bueno que se hiciera el esfuerzo, por parte de todos, de mejorar el conocimiento de los modelos actuales si queremos hablar de cambios en el modelo económico futuro.

“Bicicleta y todo terreno son vehículos útiles, pero no polucionan igual”.

4 de febrero de 2010

La Seguridad Social y el Pacto de Toledo

Hace algún tiempo descubrí esto de los blogs siguiendo en principio los escritos de aquellas personas que me resultaban más interesantes sus comentarios.  Ahora descubro otro aspecto curioso: que satisfactorio es ver como pasado cierto tiempo, algunas de las ideas expuestas en blogs anteriores toman nuevos bríos como consecuencia de los cambios que van dándose en nuestras sociedades, me explicaré:

Leo en el documento presentado por el gobierno al Pacto de Toledo, después corregido en algún aspecto, que el mismo se fundamenta en las siguientes estrategias:” Sostenibilidad, equilibrio, respeto a los derechos de los pensionistas, globalidad, Transparencia, Equidad, pacto de generaciones, gradualidad y mejora en el servicio y en las previsiones complementarias”. Dedica el documento 25 páginas a aspectos organizativos, no por eso poco importante, que podrían resumirse en pasar a los presupuestos del estado lo que le corresponde y simplificación de los organismos que gestionan la Seguridad Social.


¿Quién va a estar en desacuerdo con todos estos planteamientos?

Sin embargo a partir de ahí el documento despacha los aspectos de mayor discusión popular con una simpleza que resulta cuando menos inquietante.
Con tres (no es una expresión es un número exacto) tablitas referidas a esperanza de vida y evolución de número de pensionistas, se ponen ante la opinión pública conclusiones tan discutibles como alargar vida laboral a los 67, riesgo de quiebra del sistema, posibles recortes en las pensiones de viudedad, posible cambio del mínimo de 15 años para cobrar la pensión mínima, cambios en las pensiones de viudedad un tanto confusos,...
Como decía, hace años vengo exponiendo una serie de opiniones que al estar escritas, incluso en el blog correspondiente, no puede decirse que sea un comentario oportunista, que en el fondo coincide con casi todos los principios expuesto pero que sin embargo me permiten discrepar de alguna de las propuestas escritas y sobre todo de varias de las que no figuran en el documento pero que se han lanzado quizá como globos sonda: paso a comentar algunas de esas discrepancias respecto a la propuesta:

-Por qué 67 y no 66 o 68. Hablar de un superávit de 66M€ al tiempo que se exige más tiempo a las generaciones que lo han producido resulta poco Equitativo. Incrementar un año en la próxima década puede ser suficiente si realmente mejora la eficacia en los temas mencionados en el documento como son los ahorros en los organismos de gestión, la eficacia en la detección de fraudes, la reducción de pagos por invalidez o viudedad que no supongan sostén familiar o la mejora de las pensiones complementarias que permitiría una paulatina reducción de las pensiones, por ejemplo en jubilaciones anticipadas.
-Aspecto desde mi punto de vista clave es el número de años contemplado para el cálculo de la base de cotización. Si hablamos de 35 años para el derecho al 100%, esos son los años que deben usarse, eso es Equidad. Los técnicos después que nos explique si eso lleva a un cambio de la masa global que implica otro tipo de consideraciones como número de años elegibles o años que se actualizan. Cualquier otra componenda dejará contentos a unos e insatisfechos a otros, como se ha visto a las primeras de cambio, pero no conseguirá algo que a mi entender se ha olvidado, generar interés o al menos evitar picaresca en las generaciones que ahora ven con mucha distancia esa fecha de jubilación y esperemos que no de invalidez.

-Sin embargo, por encima de estas consideraciones, lo que no alcanzo a entender es el por qué ahora. Como digo llevo años creyendo que el tema debía estudiarse y tomar decisiones al respecto, me imaginaba un grupo de técnicos de los partidos preparando “hechos y datos” para después discutir el tema y plantearle a la sociedad aquellas conclusiones que fueran mejor para todos, lideradas lógicamente por el gobierno correspondiente.
Pero precisamente ahora que la sociedad necesita confianza, decisiones económicas que incentiven y/o provoquen que las empresas contraten personas, actuaciones que lleven a la banca a asumir su papel de generadoras de negocio, pactos de estado que aplacen las constantes broncas que alejan a la sociedad de los políticos, bien pues en este marco es cuando se presenta a bocajarro este documento sin consenso previo.

Sinceramente un poco de Marketing es bueno no sólo para las elecciones, también para dirigir las actuaciones de los dirigentes de una empresa, de un ayuntamiento o del país.
Ahora lo que se esperaría de los dos partidos gobernantes (las autonomías también son gobierno) son propuestas realistas para crear empresas, aumentar empleo y mejorar el acceso al crédito. Lo demás puede esperar.

Mi conclusión es que se han perdido muchas horas de técnicos y políticos y que un día de estos empezarán realmente a estudiar el tema, ya nos contarán, pero así no se construye confianza que es lo que realmente necesita este país.